La noche menos pensada
La noche menos pensada, un programa que, como me suele pasar, descubrí demasiado tarde hace un año, más o menos. Digo lo de tarde porque se acaba. Realmente no conozco los motivos, anoche puse la radio tarde y claro, no me enteré del todo. Manolo H. H. dirigía esta mezcla de ciencia, literatura, teatro, política, psicología, paramedicina, cultura en general y no sé cuántas cosas más y, a pesar de que todas las opiniones no son respetables, a mí me gustaba.
Me sorprendió especialmente un correo electrónico que leyeron anoche: "Hace dos años regalé mi televisor, ahora tendré que regalar mi radio". Manuel Hernández Hurtado es un hombre que lleva en esto de las ondas nocturnas bastantes años y, a pesar de posibles errores de bulto, ha manejado perfectamente un programa muy divertido con la seriedad necesaria (controlar a Bergia debe ser complicado). El llanto de una mujer mayor implorando que no se fueran, que se quedaba sola resultó muy emocionante.
Hay un blog pro La noche menos pensada para que no se vaya, pero se dicen muchas cosas en caliente y se llega a faltas de respeto en las que no se debería caer. Otra cosa, que le encanta al ser humano, es la guiarse por rumores. Se puede mandar alguna queja a la Defensora del Espectador, del Oyente y del Usuario de los Medios Interactivos de RTVE, aunque como se suele decir, caerá en saco roto. Pero por molestar que no quede. Lo de la cuña parece un poco descabellado y parece que ya se sabía que el cese iba a ser pronto, aunque si no lo dicen los implicados se trata de especular.
Nada, jodido, la noche radiofónica se apaga poco a poco... Por lo menos aún queda un Muro. Buscaré los podcast para escucharlos de vez en cuando. A ver si le cae a alguien durante estos días un panal de avejas, sin acritud.