España se rompe. Así es compatriotas. Los contubernios judeo-masónico-independentistas-catalanovascos-zapateriles van a acabar con todo. Por suerte, el COE y la Sgae ya ponen plazos a la elección de la letra del himno de nuestra tierra madre. Ya no tararearemos el Chunda chunda de toda la vida, ni lo del culo blanco del Franco. Ya no. Ahora, cuando nuestra selección nacional de fútbol salga a los terrenos de juego, oiremos la versión más cañí de El rey del pollo frito.
De esta forma podremos olvidar ese fatídico día en el que el trompetista demoníaco interpretó el himno republicano en Australia. Quizás, con una letra unificadora, los temibles rojos dejen de quemar la foto de nuestro santo rey.
Puede que veamos a Rajoy abrazado a Zapatero, a Rubalcaba con Acebes y, sí, también puede ser posible, a Esperanza Aguirre con Alberto Ruiz Gallardón. Por eso, yo espero que el consejo de sabios, seleccionado para la elección de la letra, escoja un himno que los una a todos.
Actualización (3 octubre, 16.10): Rajoy tiene la dichosa letra del himno en su programa electoral. Deberíamos estar orgullosos de contar con políticos tan españoles y preocupados con la nación. Manda huevos, como diría el otro.
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